05 julio 2006

Tito Arnal, el trompeta.


Interesante personaje, capaz de cargar sobre sus hombros a toda la Banda. Su trompeta manda, y con ella es el Capo de la Banda. Otro más, salido de la Obra de Don Bosco. Sabe que sus compañeros lo necesitamos, por eso asume con responsabilidad el compromiso.

Fue Tito, el que, en aquella fiesta de cumpleaños que la Institución celebraba con una gran cena para mil personas en el Salón del Tattersall, y que todos recordamos, sobre todo, como una anécdota risueña, aquel prolongado corte de luz en medio de la actuación del Cantante Jairo, quien tuvo que suspender su actuación momentáneamente, hasta que regresara el fluido eléctrico. A raíz de aquel inesperado inconveniente, la gente comenzaba a levantarse con la intención de retirarse. Fue en ese preciso momento, cuando Tito tomó su trompeta y comenzó a tocar, en medio de la oscuridad, “Cuando los Santos Vienen Marchando” Esta actitud tan oportuna, hizo que sus compañeros lo imitaran y se sumaran otros temas. De pronto, lo que parecía ser un trágico final de fiesta, se convirtió en un show improvisado, la gente permaneció en sus lugares acompañando con sus palmas y disfrutando, mientras otros alumbraban con sus encendedores hasta que que por fin, volvió la luz.

Esta anécdota lo pinta a Tito Arnal de cuerpo entero, así es él, divertido, oportuno, buen compañero. Con su iniciativa transformó un hecho catastróficamente negativo, en algo positivo y divertido.

Concierto de Música Popular y Marcial en Unicenter - San Isidro

Aldo Cristófalo, siempre con nosotros...


¿Necesita algo Maestro...? Esta frase quedó pegada en nuestros oídos. El recuerdo que tengo de Aldo Cristófalo, es el de una persona honorable, capaz, dispuesta y comprometida con la Institución. Muy entusiasmado con la Banda de Música, un logro de aquella Comisión Directiva, de la cual era parte y motor. Todavía hoy me emociono cuando recuerdo nuestro regreso al cuartel, luego de haber debutado aquel 25 de mayo de 1988. Él y los demás miembros de la CD al pié del micro esperándonos para felicitarnos..., estábamos todos felices... Por todo lo que significaron las personas que tanto hicieron por nuestra Banda, percibo que no hemos perdido a nadie... Mi sensación es que también Aldo nos acompaña sentado entre nosotros, disfrutando y regocijándose con cada ensayo y presentación de la Banda...